—Estás loca— me dijo Jimin con una sonrisa sarcástica.
—Secundo eso— comentó Namjoon levantando la mano.
—Es la manera más efectiva de terminarlos desde dentro— defendí.
—¿Olvidas que no llevamos ni una semana con el caso?— preguntó Hoseok obvio— Admiro tu ambición, pero la mayoría del equipo debe de estar de acuerdo con tu propuesta para poder llevarla a cabo. Hasta ahora llevas cuatro "no", que es literalmente la mitad del equipo.
—No necesito el permiso de nadie— aclaré.
—Pero sí lo necesitas— enfatizó Namjoon—, o lo siguiente que puede ocurrir es que salgas del equipo y la misión. Me supongo que quedarás suspendida hasta nuevo aviso.
—¿Ninguno me apoya?— pregunté seria.
Jungkook levantó la mano ganando una mirada penetrante e intimidante por parte de Yoongi. El menor no se rindió ante esta, es como si ya estuviera acostumbrado. Taehyung levantó la mano llevándose un golpe en cada hombro proporcionados por Hoseok y Jimin. Bien, vamos tres contra cuatro. Si Jin levanta la mano para apoyarme se deberá hacer un bolado para saber qué lado gana.
—No levantaré mi mano— anunció Jin—. Sí quiero terminar con esto rápido, pero arriesgar la vida de un miembro del equipo no será la solución. Podríamos perderte el rastro, no sabemos a lo que nos enfrentamos Parker— habló calmado—. No pretendo convertirme en alguien a quien encuentres latoso por no coincidir contigo, pero imagina esto al revés. Tal vez no con alguno de los que conociste hace algunos días, pero sí con Namjoon o Jimin quienes se oponen. Ponte en sus lugares, ¿te gustaría que ellos tuvieran la misma iniciativa que tú?
Lo pensé. Jimin no sobrevivía mucho tiempo. No lo digo porque sea débil físicamente, es solo que no hace mucho era débil de mente. No estaba bien psicológicamente en ese entonces. Y el simple hecho de imaginármelo a él estando en mi lugar definitivamente sé que me rehusaría. Tendría miedo de que recayera. En cuanto a Namjoon...simplemente ni lo quiero imaginar. Es mi hermano mayor. Definitivamente no lo dejaría ir. En ese instante mi mirada se dirigió a Tae, ¿por qué votó por que fuera? Es el más sensible de los tres, por así decirlo, entonces no tiene sentido que me quiera mandar a este tipo de cosas.
—No— respondí rendida—. No me gustaría.
—Entonces no está a discusión— decidió Jin entrando a la sala.
Namjoon y Hoseok entraron detrás de él. Yo me deslicé por la pared y me senté apoyando las manos en el suelo. Jimin detuvo a Tae de decirme algo llevandoselo hacia dentro junto a los otros dos que ya habían entrando.
—Déjanos solos— ordenó Yoongi a Jungkook.
Jungkook me vio por unos cuantos segundos. Podía sentir su mirada en mí. Chasqueé la lengua y me giré a verlo.
—¿Se te perdió algo, niño bonito?— pregunté bruscamente.
Él solamente se dio la vuelta como si lo hubiese ofendido y se fue hacia el lado contrario al que los demás. No parecía que quisiera pasar mucho tiempo de calidad con los miembros. Yoongi sacó una paleta de su bolsillo, le quitó la envoltura y la metió en su boca.
—¿Por qué siempre estás con una paleta?— pregunté.
—Eso no está para contarlo, ni tú para saberlo— contestó vago mientras se sentaba frente a mi con una pierna estirada y la otra doblada de manera que su brazo descansa sobre esta.
—Qué agradable sujeto eres— ironicé.
—No es mi intención que los demás me aprueben— dijo mirando hacia otro lado—. Te dije que no irías— comentó refiriéndose a mi intento de misión.
—Gracias por tu comprensión— rechisté—, se nota que desenvuelves bien tu lado empático. Fuiste el primero en negarte, ¿por qué?
—No quería que metieras tu trasero en un lugar donde no debías, echarías a perder todo— me miró—. No hay más razones.
—¿Eres ese chico?— pregunté bufando con cierta burla.
—¿Qué chico?— interrogó serio.
—El típico rompe bolas que se cree el mejor con un pasado misterioso que cree es suficiente para justificar su actitud actual— informé sacando una petaca para licor del interior de mi chaqueta.
—¿Me veo como esa clase de persona?— preguntó apuntándose.
—Das respuestas vagas, justificas todo con tus intereses personales, no quieres que se te hagan preguntas de tu vida, eres frío, tienes una mirada manipuladora y fulminante, se nota que si algún día consigues una chica la vas a destruir desde dentro...incluso con tu familia— terminé de decir dirigiendo el licor hacia mi boca.
De un momento a otro escuché un estruendo en mi oreja izquierda. Yoongi estampó su mano contra la pared acorralandome. Su respiración era ligeramente pesada. Se mantenía hincado sin despegar sus ojos de los míos. Con su mano libre me quitó mi bebida y la aventó hacia algún lugar. Se me acercó más haciendo que mi piel se erizara. Me pegué más a la pared en un intento de alejarme de su rostro, pero no logré nada más que él se acercara más a mí.
—No hables de los asuntos que no sabes, no te metas— susurró frente a mi para luego levantarse e irse en la misma dirección que había hecho Jungkook.
Me levanté del suelo tranquilamente mientras alejaba los mechones de cabello de mi rostro. Ja, ni que él fuera lo suficientemente importante como para indagar sobre su vida. Puede hacer lo que le plazca mientras no se meta conmigo ni con los que amo. Fui en dirección a donde Yoongi aventó mi licor y lo levanté. Aún había algo de whisky dentro así que lo tomé. Quemó mi garganta justo como mis casillas cuando se atrevió a hablarme como foránea en su vida. Lo soy, de eso estoy consciente. Pero si es la clase de chico que me mete la mano en el bolsillo trasero, entonces debe de dejar de ser tan desgraciado conmigo.
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Dejé la toalla al rededor de mi nuca para que mi cabello secara sobre esta. Me miré una vez más al espejo cubierto por la niebla del agua caliente. Lo limpié un poco, solo alcanzaba a ver la mitad de mi rostro. Ladeé un poco la cabeza y luego de eso salí del baño al abrir la puerta. Taehyung estaba en su cama con las audífonos puestos y mirando hacia el techo. Me acerqué a él y quité uno de los audífonos de su oreja ganándome su atención.
—Te quiero preguntar algo— informé.
—¿Qué?— preguntó sin retirarse el audífono restante.
—¿Por qué votaste a que me infiltrara en una de las casas?— pregunté cruzándome de brazos.
—Porque eres mi hermana y te apoyo— respingó obvio—. Nunca he ido en tu contra, no empezaré ahora. Confiaba en que lo lograría y por eso voté a "sí", pero luego te echaste para atrás.
—Me vi obligada— recordé.
—Sí, no querías ser suspendida en tu primer misión— dijo lanzando una pelota de arriba el techo para luego atraparla y repetir el proceso.
—Iré a la cafetería por algo— avisé yéndome del cuarto.
—¿En serio irás vestida así?— preguntó burlón.
—No es como si los hombres que viven en este edificio no hayan visto a una chica en blusa de tirantes y mini shorts, de seguro las han visto sin ellos— contesté irónica.
—Me traes melón— pidió antes de que cerrara la puerta.
Fuera del cuarto me encontré con Jin, quien al parecer también se dirigía a la cafetería. Lo noté por sus pijamas y porque trae trastes sucios consigo. De seguro los va a ir a dejar. Lo pasé de largo y caminé yo sola.
—¿Le preguntaste algo a Yoongi?— preguntó llegando a mi lado.
—Tsk— chaqueé—. Solo le pregunté por qué siempre trae paleta, eso fue suficiente para que se enojara.
—No le hagas preguntas, es algo que todos hemos aprendido.
—Pues lo siento, tengo curiosidad hasta por el proceso de cómo se envasa el agua— informé.
Rió un poco por mi comentario—. Ahora veo que eres parecida a él.
—¿En serio?— pregunté sin creerlo.
—Solo que tú lo muestras, él no— dijo—. Es un introvertido.
—A todo esto, ¿por qué hablamos de él?— interrogué.
—No es como si odiaras el tema— sonrió.