Chapter 35: Laberinto de espejos
Los cadáveres de las bestias comenzaron a acercarse al grupo lentamente mientras todos miraban desde sus respectivos lugares.
Shin estaba en la parte de atrás junto a Ayhana protegiendo a Prara que estaba en el centro del grupo, al otro lado estaban Gerner y Haler.
Durante el tiempo que estuvieron en el viaje, nunca los habían atacado por lo que no tenían ninguna formación preparada. Tampoco es que la necesitaran ya que los grupos no duraban los suficiente en el continente de la muerte como para alcanzar a hacer formaciones previas.
Por lo tanto cada uno simplemente se preparó a luchar por su cuenta contra las bestias que seguían caminando hacia ellos.
Frente a Shin había una bestia parecía a un orangután, era bípedo y con forma humanoide cubierto de pelaje naranja, sin embargó sus brazos eran extremadamente largos y flácidos causando que se arrastraran por el piso.
Shin levanto su espada y se preparó para luchar contra la bestia. En este momento no podía usar su [Hilo controlador] ya que estaban en campo abierto y era de día por lo que eran fáciles de notar.
Cuando la bestia estuvo un par de metros al frente de Shin, levanto uno de sus brazos y lo agito horizontalmente hacia Shin.
Shin fácilmente esquivo el brazo saltando hacia atrás pero lo que no espero es que la velocidad y la fuerza del brazo fuera tanta que genero una onda de viento que sopló su pelo hacia atrás.
'Sus brazos parecen látigos…'
La bestia no espero y volvió a lanzar su otro brazo horizontalmente hacia Shin quien volvió a esquivar saltando hacia atrás.
'Algo está mal…es demasiado lento, como si solo me estuviera atacando por instinto'
Desde que salió del monasterio de la sagrada luz y se enfrentó contra variedad de bestias, naturalmente aprendió sobre ellas.
Una de las cosas más importantes era que las bestias en etapa mortal no eran tan inteligentes y solo actuaban por instintos, pero eran capaces de identificar ataques peligrosos y actuar en consecuencia y tampoco atacaban por atacar.
Las bestias siempre tenían un plan en mente y era matar a su enemigo y comerlo. Sin embargo la bestia frente a Shin parecía carecer de toda inteligencia que tenía una bestia viva.
Shin no tuvo tiempo para pensar cuando otro de los brazos de la bestia se acercó rápidamente por su lado derecho amenazando con azotar su cabeza.
Shin esta vez no esquivo y en cambio se agacho para luego saltar con impulso contra la bestia cerrando el espacio que los separaba.
La bestia reacciono muy tarde y trato de atacar a Shin con sus dos brazos pero este fue más rápido que su ataque y con su espada apuñalo el corazón de la bestia.
Los brazos de la bestia no alcanzaron a Shin y perdieron toda fuerza quedando inmóviles.
El cuerpo de la bestia cayo al piso y Shin saco su espada que seguía clavada en su cuerpo. Sin embargo justo cuando iba a prepararse para enfrentarse a otra bestia escucho a Prara gritar desde atrás.
"¡Ya están muertos, no morirán como una bestia normal!"
Shin rápidamente se volvió a enfocar en la bestia que estaba en el piso cuando uno de los brazos de la bestia lo azoto.
Gracias a sus reflejos Shin logro defenderse del ataque con su espada pero sintió que sus brazos se adormecían por un instante.
La especialidad de la bestia eran sus brazos flácidos que servían para azotar a sus enemigos desde lejos, haciéndoles difícil el acercarse, en cambio no eran muy difíciles de esquivar. Sin embargo no había que subestimar el impacto de uno de los ataques de la bestia ya que eran dolorosos y en ocasiones mortales.
Shin se volvió a concentrar rápidamente pero por su lado izquierdo llego el ataque de otra bestia diferente.
Los otros cadáveres ya se habían acercado en lo que había durado la pelea y el grupo comenzaba a estar más arrinconada.
Shin volvió a retroceder acercándose aún más al grupo y les dio una mirada rápida aprovechando la poca velocidad de los cadáveres.
Shin era el único que no había matado a ninguna bestia, todos los demás en el grupo ya se habían encargado de algunas bestias sumando más de 20 entre todos.
Shin se mordió el labio al sentirse tan inútil, prácticamente estaba siendo una carga para el grupo. Incluso Ayhana estaba enfrentándose a más bestias de las que debería ya que algunas de las Shin bebería estar enfrentando se habían adelantado a él.
Los movimientos de Ayhana con su espada larga eran fluidos, Shin sintió que estaba viendo a alguien bailar en vez de matar bestias.
Sin embargo Shin no tuvo tiempo de dejarse distraer por los movimientos de Ayhana ya que la bestia tipo orangután lo volvió a atacar junto a otra bestia que parecía un animal bípedo pequeño, parecido a un goblin pero su cara estaba cubierta de pelaje y solo se podían notar sus ojos negros.
'Ya que no pueden morir normalmente…'
Shin comenzó a esquivar los ataques de la bestia tipo orangután mientras bloqueaba los ataques de la otra bestia que lanzaba puñetazos hacia Shin.
Poco a poco Shin comenzó a cambiar su estilo de combate que era usualmente tranquilo y defensivo a un estilo más agresivo pero menos seguro.
Si las bestias ya estaban muertas, estas no serían tan peligrosas como eran usualmente, por lo que Shin no necesito tener mucho cuidado y en cambio necesitaba matar a las bestias más rápido y no dejar que se acumularan más.
Shin volvió a esquivar el azote de la bestia tipo orangután y desvió el puño de la otra bestia generando una abertura que aprovecho junto a su pequeña estatura para lanzarle una patada a la bestia empujándola lejos para que pudiera enfocarse en la otra bestia.
La bestia tipo orangután lanzo otro ataque y Shin volvió a agacharse para impulsarse hacia la bestia.
Prácticamente sucedido lo mismo de antes, la bestia ataco con ambos brazos sin volver a alcanzar a Shin quien esta vez no clavo su espada en el cuerpo de la bestia sino que hizo un corte bajo a las piernas de la bestia haciendo un corte limpio causando que esta cayera al piso.
Shin no le dio ninguna oportunidad de hacer nada a la bestia y ataco su cuello varias veces separando su cabeza de su cuerpo y matándola finalmente…aunque ya estaba muerta.
Pero la bestia que había empujado antes no le dejo tiempo para respirar y ataco con su puños.
Shin había hecho un esfuerzo considerable en cortar el cuello de la bestia, en comparación de sus piernas delgadas que fueron cortadas en un solo corte, el cuello de la bestia era más robusto por lo que le costó más.
Sin embargo después de entrenar por meses, su estado físico no era el mismo de antes por lo que aún tenía energía para luchar.
Shin desvío los puños de la bestia con facilidad y rápidamente hizo un corte horizontal decapitando a la bestia con un corte limpio.
La sangre salpico el rostro de Shin pero este solo ignoro el líquido viscoso y fue a pelear con más bestias que se acercaban lentamente.
Aunque las bestias fueran lentas y de alguna manera débiles, superaban al grupo con números. Al principio solo fueron un poco de las bestias que estaban en la manada, sin embargo con el paso de la batalla las bestias fueron apareciendo una tras otra.
Y ahora se acercaba toda la horda de bestias muertas hacia ellos.
Haler vio esto desde lejos en un momento de respiro y no pudo evitar chasquear la lengua.
"¡Tenemos que irnos ahora!"
Aunque nadie respondió, todos tenían los mismos pensamientos.
Haler desvío un ataque usando su lanza y miro en dirección a la fortaleza que estaba a unos doscientos metros de donde estaban.
Sin embargo el camino estaba lleno de bestias por lo que era imposible atravesarlas.
"¡Mierda!"
Haler maldijo mientras decapitaba a una bestias despistada. En una situación tan precaria, dudar podría causarle la muerte a cualquiera de ellos por lo que Haler no dudo más y grito:
"!Todos júntense!"
Ninguno de los 4 dudo a las palabras de Haler y dejaron de atacar a las bestias para retroceder rápidamente y acercarse a él.
Cuando Haler vio que todos se habían acercado lo suficiente a él, levanto su lanza y la clavo en el suelo.
"!Sea donde sea que aparezcan traten de reunirse otra vez!"
Shin quiso preguntar a que se refería pero desde el lugar donde la lanza de Haler estaba clavada apareció una luz plateada que lo obligó a cerrar los ojos y cubrirse la cara.
Cuando Shin noto que la luz había desaparecido volvió a abrir los ojos solo para ver que estaba solo y las cientos de bestias que los rodeaban habían desaparecido.
"¿Qué paso?"
Shin miro a su alrededor y no pudo evitar fruncir el ceño al notar que estaba rodeado de espejos cada uno reflejándolo.
"¿Dónde estoy?"
Shin parecía estar en un pasillo lleno de espejos, no solo las paredes estaban llenas de espejos, incluso en el suelo y en el techo había espejos.
De alguna manera Haler lo había teletransportado a un laberinto de espejos.
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