—A lo que sea que mi madre te diga en el futuro, solo responde vagamente, no le des demasiada información. Si tiene sus ojos puestos en ti, gastará toda su energía contigo, lo que significa que no tendrá tiempo de presentarme a otras mujeres. Parece una buena salida.
Jiang Linyue de inmediato comprendió a lo que él se refería. Preguntó cuidadosamente: —Presidente Qin, ¿me está pidiendo que sea una agente doble? ¿Qué actué frente a la señora Qin y la mantenga a oscuras?
—Puedo darte un aumento del 20%.
—No me interesa el aumento en mi paga, presidente Qin, no sabe a lo que me refiero. En realidad yo…
Jiang Linyue quería decir algo más, pero fue interrumpida por Qin Chu.
—Si no aceptas mi propuesta, mañana mismo serás transferida a la sucursal en malasia de la compañía.
Jiang Linyue se quedó enmudecida.
El jefe era en verdad implacable. Sin un trato no salía como él quería, usaría todos los medios necesarios.