Huo Mian asintió con la cabeza.
—Lo ve, sabía que mi hermanita Mian era la más confiable. Cuando realmente importa, los verdaderos colores de alguien saldrán a luz —dijo sonriendo Huo Siqian.
—Hermano mayor, ¿qué intentas decir? No es que no quiera hacerlo, simplemente no me siento bien —intentó explicar Huo Yanyan.
—Está bien, dejen de pelear. Ya está arreglado —dijo Huo Zhenghai, observando a Huo Mian con una expresión complicada.
Luego de las 9 pm.
Huo Mian era la única que quedaba en el salón memorial. Varias coronas fueron ubicadas en los costados del ataúd, donde yacía el cuerpo de su abuela. Le habían dicho que el funeral seria mañana por lo que debía quedarse toda la noche.
Huo Mian era graduada de una escuela médica y trabajaba en un hospital hacía tiempo, así que estaba acostumbrada a estar alrededor de cadáveres. Además, era un familiar cercano, así que no estaba asustada para nada.