—Quizá fue algo bueno que los hayas atrapado en el acto. De ese modo, fue más fácil para ti terminar la relación con él —Lu Xiulan se metió un mechón de pelo detrás de la oreja.
En comparación con Lu Xinyi que tenía pelo liso, marrón y largo hasta la cintura, Lu Xiulan tenía el pelo liso, negro y corto por los hombros. Lu Xinyi era casi ocho centímetros más baja que Lu Xiulan, quien también era la más grande de las dos. Aparte del color de ojos y la complexión, no tenían muchas similitudes.
Fue cuando Lu Xiulan se dio cuenta de algo ¿Si Lu Xinyi había terminado con Gong Yijun, a dónde se estaba quedando? Yuan Jin, el otro mejor amigo de Lu Xinyi, no había vuelto de su viaje de trabajo de la ciudad B, entonces, ¿a dónde se mudó luego de irse del departamento que compartía con Gong Yijun?
—¿Te estas quedando en el departamento de Yuan Jin? ¿Creí que no volvía hasta fin de mes? —le preguntó Lu Xiulan. Estaba extremadamente frustrada, sentía que Lu Xinyi ya había perdido mucho tiempo con Gong Yijun y le había insinuado muchas veces que él no valía la pena.
—Sí, me llamó la otra noche. Me dijo que quizá extiende el viaje unos días más en la ciudad B y no, no me estoy quedando en su departamento —Lu Xinyi tomó un sorbo del trago e hizo un gesto de dolor ante el sonido fuerte que había hecho.
—¿Entonces dónde? ¿Te estas quedando en un hotel? Puedes mudarte conmigo si quieres. Guarda el dinero para mejores cosas.
Lu Xinyi se frotó la barbilla. No podía mentirle a su prima, pero, ¿debería contarle la verdad? Era como una hermana para ella igual que Meng Jiao, pero al menos con Lu Xiuan tenían una relación de sangre.
A los ocho años, cuando los padres murieron, el padre de Lu Xiulan, su tío, se ofreció a adoptarla y llevarla con él al país D, pero ella rechazó esa oferta. Decidió quedarse con su abuela, quien vivía sola y había cuidado de ella desde que era un bebé. No podía abandonarla de ese modo, sabiendo que nadie estaría allí para acompañar a su abuela.
De vuelta a su predicamento, decidió contarle la verdad a su prima.
—Xiulan, te voy a decir la verdad, pero por favor no te enojes. Trata de entenderme, ¿sí?
—¿Qué tonterías dices Xinyi? Obviamente, te voy a apoyar sin importar que decisión tomes, aunque sí, haber elegido a esa escoria fue una gran decepción para mí—le dijo Lu Xiulan—. No tienes nuevo novio, ¿verdad? Es imposible que tu estés con alguien por despecho.
—No, no tengo novio Xiulan.
—¿Entonces qué? —Lu Xiulan cruzó las piernas y tomó un pequeño sorbo del café.
Se miraron una a la otra atentamente, mientras que esperaban a que Lu Xinyi contara la verdad.
—Xiulan, estoy casada —confesó Lu Xinyi.
—¡¿QUÉ?! —le preguntó Lu Xiulan en un tono de voz alto—¿Es enserio? Xinyi, no es gracioso.
—Te estoy diciendo la verdad.
—¡Xinyi! ¿Por favor dime que no te vendiste? —exclamó haciendo una pausa—. Espera ¿La familia Sun te obligó a casarte con tu prometido? Dime la verdad Xinyi porque ya tuve suficiente de esos bastardos.
Lu Xinyi agitó la mano para desmentir las suposiciones de la prima.
—No, Xiulan. No es así. Sabes que ni siquiera mis tías pueden obligarme a casarme con él. Mi abuelo no permitiría que eso pasara.
Lu Xiulan suspiró por el alivio.
—Pero entonces, ¿con quién estás casada?
Si Lu Xinyi no se casó con el hombre que la familia Sun había arreglado por años para que se casara con ella, entonces, ¿quién podía ser? Le rezó a todos los santos para que Lu Xinyi no se haya vendido a un hombre viejo y rico.
—Shen Yi es mi esposo.
Después de unos segundos, Lu Xiulan se rió.
—¿Qué? ¿Te refieres a Shen Yi?, ¿el presidente de las empresas Shen Group? Lu Xinyi, no deberías hacer ese tipo de bromas. La gente va a pensar que eres algún tipo de cazafortuna si afirmas ser su esposa.
—Xiulan, ¿cuándo te he mentido? —dijo Lu Xinyi con voz fría y seria. La expresión la agarró desprevenida a su prima. Luego, le mostró la mano izquierda, donde tenía el anillo de bodas que le había dado Shen Yi.
No tenía una piedra preciosa grande en el centro. No era tan grande como esos anillos que llevan las esposas de los políticos y de la alta sociedad, pero era llamativo.
—¿De verdad estás casada con él? —Nunca pensó que Lu Xinyi se fuera a casa con un hombre tan poderoso sin pensarlo dos veces.
—Sí.
Le tomó un momento recuperarse a Lu Xiulan. Respiró hondo y escudriñó con cuidado a su prima para ver si mentía. No quería sacar conclusiones apresuradas. Seguro, Lu Xinyi tenía una razón valida por la cual se casó con Shen Yi, así que quizá seria cuidadosa, especialmente, si la familia Sun estaba involucrada.
Si Lu Xinyi se había casado con Shen Yi, sería más fácil para ella rechazar todas las invitaciones y pedidos que le hiciera la familia Sun. Lu Xinyi estaría protegida y feliz de quedarse al lado de él, ya que tenía la reputación de un hombre de dignidad y seriedad firme.